La biomasa: una energía renovable que puede prevenir incendios
La gestión sostenible de los bosques implica, entre otras cosas, una correcta extracción de la biomasa sobrante, lo que es de vital importancia para poder prevenir incendios. En este sentido, la Asociación Española de Fabricantes de Estufas, Cocinas y Chimeneas (AEFECC) quiere concienciar de la importancia que esta materia tiene para salvar a nuestros bosques de los temidos incendios.
Según el Foro Mundial del Medio Ambiente (WWF), los incendios vividos en los últimos años podían haber sido prevenidos hace más de 20 años mediante la continua restauración, preparación y cuidado de los bosques, reduciendo así la cantidad de biomasa acumulada en zonas forestales mediante la recogida de leña o ramas.
Aunque en el año de 2014 España experimentó la cifra más baja de incendios de los últimos 10 años, se produjeron aproximadamente 3.000 incendios de menos de una hectárea y ardieron 46.159 hectáreas de superficie forestal.
Nuestro país, a pesar de ser el tercero en Europa con más superficie boscosa, es el noveno en el aprovechamiento de sus recursos y uno de los que más incendios experimenta. En este caso, la biomasa puede ser una de las soluciones a este contraste.
De hecho, en otros países de nuestro entorno con mayor superficie boscosa, los incendios no son tan devastadores gracias al empeño que se pone en la limpieza de los bosques y en la reutilización del excedente forestal.
Por último, la AEFECC ha estimado que incrementar la implantación de la biomasa en un 18% como combustible para los sistemas de calefacción supondría un ahorro de casi 500 millones de euros anuales y un importante paso hacia delante en la consecución de los objetivos medioambientales.
En conclusión, la biomasa, aparte de jugar un papel vital en la prevención de incendios y equilibrar los ecosistemas, es una fuente de energía sostenible de bajo coste y la mejor alternativa a los combustibles fósiles.